La era digital ha modificado ciertos aspectos de nuestra forma de vivir. No descubro nada con decirlo. Pero, la pregunta es, ¿hasta dónde dejaremos a la tecnología adueñarse de nuestras vidas? ¿somos capaces de ponerle un freno? ¿Ponemos las manos en el fuego por internet, ipod, celulares, iphone, etc?
Les doy un pequeño ejemplo:
¿qué debemos hacer cuando, en una reunión con pareja/amigo/familiar/compañero/socio, ésta persona atiende su celular y se dispone a la charla mediante el aparatito móvil como herramienta, interrumpiendo descaradamente la socialización personal del "cara a cara" ?
Caras posibles:
* Cara de "bueno cortaste el clima de la conversación, la cual estaba interesante y me molesta bastante".
* Cara de "atendé tranquilo, yo igual estoy esperando unas llamadas".
* Cara de "bueh, no me importa, total me estaba aburriendo... hoy me veo una peli en dvd..."
Hagan el ejercicio de prestar atención, en bares, cafés, restaurantes o el lugar que sea, en donde se dé la situación: "conversación entre dos personas, y uno de ellos atiende su teléfono móvil".
Observen las reacciones de ambos. Miren la cara del que debe esperar paciente o impacientemente que la llamada finalice. Esa no es una cara de felicidad, ni de "estar pasándola bomba". Es el rostro de la impotencia, la sutil humillación y el abandono (exagerados términos quizás, pero que explican bastante bien el momento).
0 COMENTARIOS:
Publicar un comentario